https://elpais.com/elpais/2020/02/13/ciencia/1581616329_518388.html
Si todo el mundo dejase hoy mismo de fumar, de alimentarse de comida basura —precocinados, bollería, pizzas congeladas—, de tomar bebidas azucaradas, de abusar del alcohol, de pasarse los días en el sofá y de exponerse al sol sin protección, se evitaría el 40% de los futuros tumores malignos. Estos factores son los principales enemigos de la salud pública, pero también hay otros adversarios invisibles. Las infecciones por virus y bacterias provocan el 8% de las muertes por cáncer en España, según acaba de calcular un equipo dirigido por el médico Josep Maria Ramón, del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge. El tabaco por sí solo causa el 22% de los fallecimientos por cáncer, según la Organización Mundial de la Salud.
Más de 110.000 personas murieron por un tumor maligno en España en 2017. El grupo de Ramón calcula que 9.115 de estas muertes, alrededor del 8%, son atribuibles a cánceres causados por agentes infecciosos. Cuatro microorganismos serían los responsables de casi todas estas defunciones: la bacteria Helicobacter pylori (48%), el virus de la hepatitis C (31%), el virus del papiloma humano (15%) y el virus de la hepatitis B (4%).
“Es el primer estudio realizado en España que intenta cuantificar y explicar la mortalidad por cánceres cuyo origen son factores infecciosos”, afirma Ramón. Más de la mitad de los españoles viven con la bacteria Helicobacter pylori, un microbio que en ocasiones causa infecciones en el estómago y aumenta el riesgo de cáncer gástrico. La comunidad científica sospecha que se transmite por agua y alimentos contaminados, pero no hay certezas.
El virus de la hepatitis C se transmite por la sangre y es una importante causa de cáncer de hígado. Controladas ya las transfusiones de sangre infectada, las principales vías de transmisión son las jeringuillas compartidas y algunas prácticas sexuales de riesgo. El virus de la hepatitis B también se transmite por el contacto con la sangre o el semen de una persona infectada.
“Un ejemplo flagrante donde evitaríamos el 100% de las muertes es la infección por el virus del papiloma”, señala Ramón. Algunos tipos de este virus —de transmisión sexual— son considerados de alto riesgo por su papel en la aparición de tumores de cuello de útero, aunque la mayoría de las infecciones no causan cáncer. “Estamos administrando a las niñas una vacuna efectiva frente a este virus y en los próximos años observaremos una disminución importante”, opina el médico.
“Los tumores asociados a infecciones, en general, tienen un mejor pronóstico”, tranquiliza el oncólogo Juan de la Haba
“Las causas infecciosas existen y son evitables, pero son una causa relativamente menor de cáncer y, por tanto, de muerte por cáncer”, subraya el médico Joan B. Soriano, profesor de la Universidad Autónoma de Madrid. “Sin duda, el factor de riesgo más importante de muerte por cáncer, en España y en el mundo, sigue siendo el tabaco”, advierte.
Soriano es el coordinador en España del Estudio de la Carga Global de las Enfermedades, una radiografía mundial dirigida por la Universidad de Washington. “El tabaco por sí solo explica más del 28% de las muertes por cáncer de estómago y de hígado. Esto es 3,5 veces más que el 8% de este estudio”, alerta el profesor. “Y en mujeres el tabaco explica el 21% de las muertes por cáncer de cérvix”, remacha.
La nueva investigación, publicada en la revista Medicina Clínica, analiza la mortalidad, no la incidencia. Josep Maria Ramón cree que los tumores relacionados con infecciones podrían rondar entre el 12% y el 16% del total de casos de cáncer, acaben o no en muerte. “La cifra es parecida a la observada en países de nuestro nivel cuando se estudia la mortalidad”, apunta Ramón.
Al oncólogo Juan de la Haba le cuadran estas cifras con su experiencia en el Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba. “Los tumores asociados a infecciones, en general, tienen un mejor pronóstico”, tranquiliza. “Este estudio aporta valor al mostrar la importancia que tienen los hábitos higiénicos, dietéticos y sexuales para evitar contagios. No solo hay que evitar el tabaco, el alcohol y la obesidad. También hay que llamar la atención sobre las causas infecciosas del cáncer”, añade De la Haba, miembro de la junta directiva de la Sociedad Española de Oncología Médica. “Es otra manera de prevenir el cáncer”.