La actual regulación permite libertad de descuentos por parte de los laboratorios a las oficinas de farmacia.
Devolver los descuentos y bajar más los precios pone a las farmacias VEC en vilo
El Plan de acción para fomentar la utilización de los medicamentos reguladores del mercado en el Sistema Nacional de Salud: medicamentos biosimilares y medicamentos genéricos, aprobado por el Ministerio de Sanidad y la Comisión Permanente de Farmacia, integrada por los responsables de Farmacia de las autonomías, el pasao abril y que ha sido ofreido en exclusiva por CF la semana pasada ha creado incertidumre y críticas en el el sector sanitario.
Una de las propuestas que del documento que más impactarían en las farmacias es la de modificar el régimen de descuentos que hacen os laboratorios a las boticas restringiéndolos y cambiando la tendencia a irlos facilitando.
La actual regulación permite libertad de descuentos por parte de los laboratorios a las oficinas de farmacia. Ésta fue una decisión del Gobierno de Mariano Rajoy en la Ley de Acompañamiento a los Presupuestos Generales de 2015, pactado con la industria, innovadora y de genéricos,y, según la Ley de Garantías, “los descuentos podrán efectuarse para los medicamentos financiados con cargo al Sistema Nacional de Salud, siempre que se lleve un registro mensual de tales descuentos en las empresas titulares de los mismos y en las entidades de distribución, interconectado telemáticamente con el Ministerio de Sanidad”.
Pero el documento de Sanidad señala que “estos descuentos son sobre el PVL, de manera que el nivel de PVP y de reembolso queda inalterado”, y por ello propone “la realización de una modificación normativa que tenga eficacia sobre la articulación de un mecanismo de devolución de los descuentosde las oficinas de farmacia al SNS”.
la justificación
El documento alega que la existencia de genéricos con precios inferiores al precio de referencia de un conjunto “ofrece una escasa repercusión económica tanto para el sistema de salud pagador como para el ciudadano, dados los descuentos por volumen ofrecidos por los laboratorios a las oficinas de farmacias y distribuidores mayoristas”.
Para Jaime Espolita, presidente de la Sociedad Española de Farmacia Rural (Sefar), el plan “es una catástrofe”, tanto por las propuestas sobre descuentos como por los nuevos precios. “Es verdad –explica–, que las farmacias rurales no son precisamente las que más se benefician de los descuentos, “pero estos son una ayuda indirecta y su desaparición es la puntilla para la economía de las farmacias con más dificultades”. Además, dice Espolita, “no se cómo van a articular una devolución de descuentos al sistema y, en todo caso, los farmacéuticos no podemos convertirnos en recaudadores para el Estado”.
Fuentes colegiales subrayan a CF, más que sorprendidas, que no han recibido consulta alguna ni sugerencia por parte del Ministerio ni de las administraciones regionales acerca de este documento y que en la primera oportunidad plantearán al Ministerio de Sanidad el alcance de estas medidas, los plazos que maneja y sus diferencias con las opiniones que recoge el documento aprobado con las autonomías.
Precios más bajos
También se incluye en el plan un cambio del sistema de precios de referencia, basado en descuentos de los laboratorios al SNS que fijen precios más bajos (algo que ya existe en el modelo actual pero que se habría paralizado en los últimos tiempos), por la que el farmacéutico deberá dispensar dicha presentación con el precio más bajo –lo que podría convertirse en una suerte de subasta–.
Este precio más bajo será voluntario y las presentaciones de los medicamentos, bien sean genéricos, biosimilares o de marca, que lo presenten serán aquéllas que dispondrán de la ventaja competitiva en el momento de la dispensación. Se considera desde Sanidad que el mercado del genérico y del biosimilar sí puede competir a la baja y desarrollará medidas en este sentido.
El documento fija cómo se hará la modificación: el titular de la autorización de comercialización podrá presentar ante la Dirección General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia, solicitud de descuento sobre su precio de referencia; estos descuentos no serán tenidos en cuenta a efectos del cálculo del precio de referencia de cada conjunto y se analizará la introducción de medidas de garantía de estabilidad . “A efectos de sustitución por el farmacéutico, el precio más bajo a tener en cuenta será el precio más bajo con descuento”.
Cambiar varias leyes
El documento de Sanidad y las autonomías, que se ha firmado sin el conocimiento de algunos consejeros de Sanidad que así lo han confirmado a CF, se aprobó a poco más de un mes de las elecciones autonómicas, y por tanto, sin garantías de continuidad de los Gobiernos firmantes.
La propuesta de Sanidad, señalan a este periódico juristas consultados, requeriría la reforma no sólo de la Ley de Garantías sino de la de Contratos Públicos. Y volver a modificar los descuentos y el fin de la prioridad de los genéricos en la dispensación que se hizo en la Ley de Presupuestos de 2015 exige la aprobación de una norma del mismo rango legal.
En este momento el Gobierno nacional sigue en funciones, no se conoce la alianza de fuerzas que sustentarán al nuevo gabinete ni están constituidas las comisiones parlamentarias, entre ellas las de Saniad y Hacienda, que deberán estudiar las proposiciones de modificación, recibir enmiendas y someter el texto resultante a los plenos del Congreso y del Senado.
Por otra parte, hasta ahora, Sanidad llevaba a la Comisión Permanente propuestas legislativas concretas y articuladas que, tras su paso por los responsables de Farmacia, se llevan al Consejo Interterritorial. Ahora no ha sido así y una vez que el ministerio tenga elaborada una propuesta de nueva norma tendrá que volver a hacer ese recorrido antes de pasar por el trámite parlamentario. No es una reforma para ya.