Según el texto, publicado en el Journal of Adolescent Health, los medicamentos brindan unos beneficios significativos
Algunos padres se muestran reticentes a dar a sus hijos unos estimulantes potentes para tratar los síntomas del trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH), pero una nueva revisión muestra, publicada en Journal of Adolescent Health, que los medicamentos brindan unos beneficios significativos.
Además de ayudar a los niños a calmarse y a concentrarse en el colegio, la revisión encontró que los medicamentos también ayudan a los jóvenes a evitar las consecuencias negativas asociadas con el TDAH a largo plazo, que incluyen depresión, el abuso de sustancias e incluso problemas al conducir.
“Tratar el TDAH puede ayudar a los niños a evitar algunas de las complicaciones graves asociadas con el trastorno”, señaló el autor del estudio, Joseph Biederman, jefe de los programas clínicos y de investigación en Psicofarmacología Pediátrica y TDAH en adultos del Hospital General de Massachusetts, en Boston (Estados Unidos).
Menos riesgo
En específico, el estudio sugirió que el uso temprano de los medicamentosestimulantes para el TDAH se vinculaba con un riesgo más bajo de depresión mayor, ansiedad, trastorno de la conducta, trastorno bipolar, tabaquismo, abuso de sustancias, problemas con la conducción y bajo rendimiento escolar.
| “Tratar el TDAH puede ayudar a los niños a evitar algunas complicaciones graves asociadas con el trastorno” |
Aunque el estudio actual no puede probar una relación causal definitiva, Alan Geller, psiquiatra del Hospital de Gracie Square en la ciudad de Nueva York, que trata a niños y adolescentes, ha asegurado que tiene sentido que tratar los síntomas del TDAH pueda ayudar a prevenir otros problemas.
“Un niño hiperactivo que interrumpe y perturba la clase es molesto. Acaban siendo marginalizados, lo que puede conducir a trastornos de abuso de sustancias o de la conducta, o a la depresión y la ansiedad si están constantemente frustrados”, explicó.
Dificultades en la vida personal
Geller asegura que los adultos con TDAH pueden tener problemas en el trabajo y dificultades en sus vidas personales.
“Puede comenzar a los siete u ocho años, cuando no pueden orientarse en la vida como otros niños. Acaban sintiéndose solos. Es un problema importante sin el tratamiento”, aseguró.
Pero Geller señala que esta investigación muestra que si se trata a un niño con medicamentos que lo ayuden a controlar sus síntomas de TDAH, hay menos riesgo de marginalización o de que busque estimulación en otras actividades, como la conducción imprudente o el tabaquismo.
Geller comenta que los hallazgos apuntan a que los beneficios de los fármacos para el TDAH superan a sus riesgos. Los efectos adversos de los fármacos incluyen una ligera supresión de la estatura, del apetito y un riesgo potencial de adicción.
Tres estudios
La revisión incluyó a tres estudios. Dos fueron estudios prospectivos a largo plazo de niños con y sin TDAH. Algunos de los niños diagnosticados con TDAH fueron tratados con medicamentos estimulantes, mientras que otros no. La edad promedio de los niños era de 11 años al inicio del estudio. Tenían 20 años cuando les dieron un seguimiento. El tercer estudio observó a adultos jóvenes (de 18 a 26 años) con el trastorno.
Los investigadores evaluaron el desempeño de los voluntarios en un simulador de conducción antes de que comenzaran a tomar medicamentos estimulantes, y de nuevo seis semanas después de que comenzaran el tratamiento.
Los investigadores calcularon el número de personas que tendrían que ser tratadas con medicamentos para observar un beneficio. Así, encontraron que tres personas tendrían que ser tratadas con un medicamento para el TDAH para evitar que un niño repitiera un curso o desarrollara ansiedad, un trastorno de la conducta o un trastorno oposicional desafiante; cuatro personas tendrían que ser tratadas para evitar que una persona tuvieradepresión mayor o un accidente durante la simulación de conducción; cinco personas necesitarían tratamiento para prevenir un trastorno bipolar; seis personas tendrían que ser tratadas para prevenir que una persona fumara cigarrillos; y 10 personas tendrían que ser tratadas para evitar el trastorno de abuso de sustancias en una persona.
Los investigadores están planificando una investigación futura para ver si tratar el TDAH con medicamentos puede ayudar a reducir el trastorno por estrés postraumático, las lesiones cerebrales traumáticas y el suicidio. Biederman también añadió que planifican estudiar si el tratamiento del TDAH se vincula con el éxito en el trabajo, añadió Biederman.
